El Banco Central anunció una normativa que generó debate en el mercado cambiario: a partir de ahora, quienes compren dólares oficial no podrán, durante un plazo de 90 días, acceder de forma simultánea al dólar financiero (MEP o contado con liquidación). La economista y asesora financiera Florencia Linares, de Amauta Inversiones, explicó a LA GACETA que esta medida no constituye un “nuevo cepo”, sino una restricción cruzada pensada para cortar con el llamado rulo cambiario.
“No hay cepo. Cualquier persona puede comprar la cantidad ilimitada que quiera en el dólar oficial, a través de bancos y homebanking, o bien en el mercado financiero. Lo único que no se permite es mezclar ambos mercados”, aclaró Linares. Según la especialista, el problema surgía porque personas físicas compraban dólares al tipo de cambio oficial y luego los transferían a cuentas comitentes en brokers para venderlos vía MEP, generando una ganancia de hasta 4%. Esa operatoria, en palabras de la economista, implicaba un uso directo de las reservas internacionales.
La decisión del Banco Central llega en semanas clave para la acumulación de reservas, en un escenario en el que el Gobierno implementó retenciones cero al agroexportador. “El objetivo es que el BCRA pueda aprovechar el ingreso de divisas genuinas y evitar que se fuguen por este arbitraje”, señaló Linares. Incluso el ministro de Economía, Luis Caputo, estimó que eran unas veinte personas las que aprovechaban esta maniobra de manera intensiva.
Reacción del mercado
El anuncio no fue bien recibido. “Ese mismo viernes, cuando salió la normativa, el dólar MEP y el contado con liquidación subieron casi 5%, ampliando la brecha cambiaria. Es decir, no resuelve problemas de fondo”, advirtió la economista.
Si bien las últimas semanas habían traído cierta calma con el apoyo de organismos internacionales, el acuerdo con Estados Unidos y la baja de retenciones, Linares remarcó que las cuestiones estructurales siguen pendientes. “De cara a las elecciones del 26 de octubre, se necesitan consensos y reformas profundas que pasen por el Congreso para darle bases más sólidas a la economía argentina”.
¿Qué cambia para el ahorrista común?
La economista fue clara: la nueva restricción no afecta al uso cotidiano de dólares. “No tiene nada que ver con viajar al exterior ni con usar dólares que uno ya tiene en la cuenta. Simplemente, si comprás en el banco, durante 90 días no podés comprar en la billetera virtual o en el mercado financiero, y viceversa”, explicó.
En otras palabras, el ahorrista puede seguir comprando dólares oficiales en su banco, usarlos libremente en el extranjero y disponer de ellos sin restricciones. Lo único que queda prohibido es operar en ambos mercados al mismo tiempo para aprovechar diferencias de cotización.
Mirada hacia adelante
De cara a los próximos meses, Linares señaló que la política monetaria restrictiva, la caída del consumo y la reciente baja de tasas del Banco Central marcarán el pulso económico. “Esa medida puede impactar en el votante medio, aunque no de manera inmediata, porque define el costo del dinero en la economía”, apuntó.